Internet desplaza las oficinas físicas.

La llegada de las nuevas tecnologías orientadas todas al uso del Internet y el aumento de dispositivos conectados a la Red, han generado una expansión hacia el mundo digital que no podemos evitar.
Las empresas se están mudando del mundo offline al mundo online por cuestiones evidentes, haciendo que nuestra vida personal y profesional sea, cada vez, más fácil de compaginar.
A pesar de esta situación, aún nos encontramos frente a una problemática general. Estamos atrapados en la frontera de lo digital y lo físico. Lo nuevo y lo viejo se solapan, y nos encontramos en una etapa de transición donde las empresas están intentando inculcar a sus empleados, y a su vez muchos trabajadores intentan hacer ver a sus jefes este nuevo fenómeno.
Hay algo muy notable que beneficia el entorno empresarial actual, que suele ser bastante simple, gracias a que la mayoría de las herramientas necesarias para trabajar están disponibles online, facilitando de esta manera el camino de la independencia del mundo físico al mundo digital.
Según estudios previos demuestran que aquellas personas que desarrollan su actividad desde otro lugar diferente a las instalaciones físicas de la empresa, (casa, bar, parque, etc) han aumentado en un 108%, generando esto un nuevo fenómeno en el campo laboral.
Esta situación se da gracias a que las cosas son más fáciles ya que se cuentan con las herramientas digitales necesarias que nos permiten desarrollar nuestra actividad desde la movilidad, hay un dato relevante a tener en cuenta, la mayoría de la gente continúa yendo a la oficina y malgastando cientos de horas para ir de su hogar a su trabajo. Y viceversa. Situación que se proyecta en los próximos cinco años a disminuir en un 8% aproximado.
Las compañías deben entender que los tiempos cambian y las nuevas generaciones buscan otros formatos laborales que les permitan compaginar su vida familiar con su mundo laboral, y esto solo se puede lograr si su oficina está definida en un espacio concreto.
Para lograr impartir la modalidad del teletrabajo, es necesario que las empresas incrementen su flexibilidad laboral, solo de esta manera se logrará adaptar este fenómeno que otros países como: Canadá, Australia, Suiza, Estados Unidos, entre otros, que funciona sin ningún tipo de percance, generando grandes beneficios a las economías.
Para poder dar el paso y entrar en la dinámica del teletrabajo, es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos:
Las oficinas son una pérdida de tiempo y dinero. A pesar de que nos encontramos en la era digital, el precio del alquiler y el mantenimiento de una oficina sigue siendo uno de los mayores gastos de una compañía. Eso por no hablar de la cantidad de costes asociados (tiempo y dinero) que se derivan del desplazamiento de la casa de los empleados al lugar de trabajo.
Un estudio de Census Bureau confirmó que unos 10,8 millones de trabajadores estadounidenses tardan, al menos, una hora de media en llegar al trabajo. De esos, unos 600.000 encuestados amplían esa cifra hasta llegar a los 90 minutos.
Si los empleados tuvieran la opción de trabajar desde casa, estos costes se reducirían considerablemente, generando una contraprestación que beneficia al cliente final.
Lo importante es la productividad, mas no el lugar.
A día de hoy todo el mundo tiene un móvil y un portátil, herramientas más que suficientes, por lo que el trabajo de muchos se puede desempeñar desde cualquier punto del planeta.
En un estudio reciente de SoftChoice, se descubrió que el 70% de los empleados preguntados cambiarían de trabajo si se les ofreciera la oportunidad de trabajar desde casa. De ellos, el 62% afirmaron que eran más productivos si trabajaban desde casa. Estos datos se complementan con otra investigación de la Biblioteca Nacional de Medicina de EEUU que sugiere que los teletrabajadores suelen tener mejores evaluaciones de empresa que los que trabajan desde la oficina.
A día de hoy existen varias herramientas de productividad online que pueden ayudarte a ello, como TimeViewer, Evernote, Icloud o cualquiera de los servicios de Google, o los famosos CRM.
Mejorar la calidad de vida, genera una mayor productividad laboral.
Mientras la tecnología avanza a pasos agigantados para aumentar nuestra productividad y modernizar la forma en la que trabajamos, las grandes empresas se aferran a los sistemas tradicionales.
Saber conciliar la vida laboral y personal ha sido un tema recurrente tanto para empleados como para compañías, ya que son muchos los padres a los que les gustaría pasar más tiempo con sus hijos o no dedicar tanto tiempo al desplazamiento al trabajo.
Algunas empresas han empezado a tomar en consideración este punto. Por ejemplo, Apple, GE o IBM cuentan con políticas de flexibilidad laboral entre sus estatutos. Incluso, Mark Zuckerberg ha hablado en varias ocasiones de la importancia de conciliar la vida laboral y personal para tener a sus empleados contentos.
El futuro de las oficinas.
Es muy probable que las oficinas nunca desaparezcan. Después de todo, que haya una cultura corporativa relacionada con el trabajo en grupo, así como que exista buena comunicación entre empleados y jefes es fundamental para que la empresa avance.
Los espacios de oficina son un buen lugar para interactuar con nuestros compañeros, así como para hablar de nuestros retos y desafíos, y para preguntar dudas o hacer sugerencias relacionadas con nuestro empleo.
Sin embargo, lo que está claro es que los espacios de trabajo están siendo alterados por la inminente evolución tecnológica, que nos permite compatibilizar mejor nuestra vida personal y laboral ofreciendo horarios flexibles, generando en notable beneficio que se refleja tanto el los resultados económicos de la empresa como de la satisfacción de las personas.