Septiembre siempre marca un punto de inflexión: termina el verano, regresan las clases, el trabajo y con ellos la necesidad de reorganizar nuestros hábitos. Una de las áreas donde más cuesta adaptarse es la alimentación. Después de semanas de comidas improvisadas o más relajadas, toca volver a pensar en menús equilibrados, prácticos y fáciles de transportar.
Las frutas y verduras de temporada son grandes aliadas en este proceso: no solo están en su mejor momento de sabor y precio, sino que además aportan la energía, vitaminas y frescura necesarias para enfrentar largas jornadas. A continuación, compartimos tres propuestas que combinan sencillez, salud y, sobre todo, practicidad para preparar en casa y llevar en tupper.
Ensalada de garbanzos con tomate, pimiento y uvas
Una receta que combina legumbres y fruta, ideal para comer bien sin complicarse. Basta con mezclar garbanzos cocidos con dados de tomate, pimiento verde y rojo, y añadir un puñado de uvas partidas a la mitad. El resultado es un plato fresco, saciante y muy fácil de preparar en grandes cantidades. Aliñado con aceite de oliva virgen extra, limón y un toque de comino, se convierte en una opción perfecta para llevar al trabajo. Además, aguanta bien varias horas en el tupper sin perder su sabor.
Salteado de calabacín, berenjena y pollo con toque de ciruelas
Los calabacines y berenjenas están en su máximo esplendor en esta época del año, y son perfectos para platos de diario. Un salteado rápido con dados de pechuga de pollo, acompañado de rodajas de calabacín y berenjena, se transforma en una comida completa. Para darle un giro diferente, puedes añadir ciruelas frescas cortadas en láminas, que aportan un contraste dulce y sorprendente. Esta combinación se recalienta muy bien en el microondas, lo que lo convierte en un plato práctico y sabroso para la oficina.
Couscous integral con melocotón y hierbas frescas
El couscous es uno de los básicos de la cocina rápida: se prepara en apenas cinco minutos. Al mezclarlo con trozos de melocotón, pepino y hierbas frescas como menta y perejil, obtenemos un plato ligero pero lleno de sabor. Puedes añadir garbanzos o queso fresco en dados para enriquecerlo aún más. Guardado en un tupper, se conserva perfecto para el almuerzo y también es una gran opción para una cena ligera después de un día intenso.
Volver a la rutina no tiene por qué ser sinónimo de aburrimiento en la mesa. Con un poco de planificación y creatividad, es posible disfrutar de comidas equilibradas, frescas y llenas de color que nos ayuden a mantener la energía y el bienestar. Estas tres recetas son solo un ejemplo de cómo aprovechar las frutas y verduras de temporada para preparar tuppers prácticos y deliciosos que harán más fácil la vuelta al trabajo o a los estudios.












































